Viernes a trabajar: tuvimos Consejo en Logisfashion Mexico y, que narices, da gusto sentarte a ver números con crecimientos del 50% con respecto a 2011 y nuevas cuentas como Levi’s. Cuando uno viene de la tristeza y el ambiente de estancamiento que se respira en España, esto es balsámico. La verdad es que reitera y refleja una verdad que me gusta recordar: el mercado es el mundo, ya no es ni España ni Europa y no se trata de una opción, es mera lógica o incluso supervivencia incluso para algunas empresas; en esta empresa supimos verlo hace años y el tiempo recompensa; tras un duro trabajo y nuestra capacidad de anticipación y decisión recogemos los frutos de una internacionalización bien planificada y ejecutada.
Para celebrarlo, luego del trabajo, alimentar el cuerpo es lo suyo ¿no?; nos fuimos de comida con el equipo gestor en Tepotzotlan, en Los Virreyes con escamoles (huevas de hormiga) y gusanitos de maguey….deliciosos.
Por la noche fuimos a cenar con mi padre, que anda por estos lares, al Izote de Patricia Quintana,este restaurante que fue referencia hace años, está lamentablemente ahora en franca decadencia …pudimos conseguir mesa el mismo viernes por la tarde.
El sábado, tras mi carrerita de rigor por el Bosque de Chapultepec (12 kms duros por la altitud), nos fuimos a desayunar a la Colonia Roma. Junto con la aledaña Condesa es el barrio bohemio de la ciudad, donde están los bares y restaurantes más trendies. Allí desayunamos en el restaurante-deli que ha abierto otra de las divas de la cocina mexicana, el Delirio de Mónica Patiño; son altamente recomendables los huevos en cualquiera de sus variedades; magnífico sitio para el brunch del fin de semana.
A mi padre, que es de gustos particulares e ideas fijas, se le metió en la cabeza acudir a Xochimilco. En este pueblo al sur pero dentro del DF están las famosas lagunas donde los mexicanos acuden los fines de semana a pasear en una barquitas de madera coloridas muy características (las trajineras) y degustar tacos de todo tipo con cervezas y, como no, buen tequila. Pero esto no toca hoy; mi padre se planta en ir a la plaza de Xochi a tomar pulque. El pulque, cuentan, era la bebida que tomaban los Dioses en la época prehispánica. Hace años las pulquerías se contaban a miles en México pero ahora es difícil de encontrar, ya que el licor sólo se fermenta de manera casera en algunas comunidades indígenas. Encontramos la pulquería donde te lo sirven como si fuera horchata en vasitos de plástico de un cubo con una especie de cucharón; como es barata es lo que utiliza la gente humilde para emborracharse. Una vez catada, tiene un gusto similar a la sidra pues no deja de ser Maguey (cactus de donde se hace el mezcal) fermentado. Dicen que tiene propiedades curativas….veremos que “milagros” obra en mi cuerpo.
El martes seguimos y os llevo a conocer Queretaro. Buen fin de semana.