¡Felicidades Logisfashion!

Logisfashion

Juan Manzanedo Logisfashion

Un  21 de Octubre de 1996, fundábamos Carlos Villa, Juan Martínez  y yo, Logisfashion S.A. como el primer operador especializado en Logística textil en España. ¡19 años! Se dice rápido, pero vienen cargados de mil anécdotas,  mucho esfuerzo y trabajo  pero también mucha satisfacción al mirar atrás y ver como ese proyecto de negocio del IESE se convirtió en una innovadora y consolidada  empresa multinacional con un excelente equipo humano y profesional  que ahora suma  más de 800 personas y al que quiero públicamente agradecer por su labor y dedicación.

Hoy contamos con naves en España, México,  Colombia, China, Vietnam, Chile,  Miami y Panamá  para dar servicio de calidad a un importante número de clientes que nos han dado su confianza y que nos han permitido crecer, innovar  y expandirnos generando estrechas relaciones y proyectos de futuro.

Podemos decir que nuestro servicio está muy asentado y estructurado. Nuestro valor agregado  frente a otros operadores logísticos, es el de poder brindar  la especialización en el sector textil/moda pero también ser capaces de dar un servicio global a nuestros clientes y seguirlos en su crecimiento y expansión internacional  allí donde decidan vender sus productos.

equipo LogisfashionHace ya 6 años que Logisfashion creó la división de e-commerce, y ha ido creciendo muy positivamente. Como queremos seguir dando  un servicio de calidad y seguir creciendo de la mano con nuestros clientes para satisfacer a un consumidor final cada vez más informado, conectado, activo y exigente hemos invertido mucho en innovación, en sistemas informáticos y en tecnología, para estar un paso por delante de las necesidades específicas de este sector.

Como he dicho en la entrevista que me hicieron en El Vigía (que os adjunto ) :

“Si ahora iniciase de nuevo este negocio, probablemente no seguiría los mismos pasos…pero estoy muy contento de lo que hemos logrado y los retos que tenemos por delante de cara al 2020.  ¡Felicidades  Logisfashion  y a por muchos más!

Logisfashion a la conquista del gran EE UU

Año ajetreado el 2015. No contentos con poner en marcha Colombia y Panamá donde tenemos al Pere sudando la gota gorda y restructurar totalmente China con Jose María y Ying sufriendo lo suyo, se me ocurre que estratégicamente Estados Unidos debe de ser la pieza angular del plan estratégico de Logisfashion a 2020. Y en eso llevamos todo el año, dándole vueltas a ver de qué manera somos capaces de entrar en un mercado tan complicado, tan maduro y tan enorme como el norteamericano.

Llevamos meses evaluando cómo, con quien y, sobre todo con qué dinero lo financiamos que no es baladí. Parece claro que el puerto de entrada será Miami pues es donde más relación hay con las marcas europeas que entran en EEUU y donde más van los latinoamericanos a comprar o a intentar vender…y ambos son nuestros clientes.

Queremos conocer las marcas americanas que ahora son grandes desconocidas para nosotros y, de esta manera, ser capaces de venderles nuestros servicios globales: en México o Colombia o Chile o bien en Europa o, como no, en China donde seguro que hay muchos servicios de Control de Calidad o de logística que les podemos vender…pero para eso hay que conocerlos…y por ello tenemos ya a una persona dedicada a recorrer el país, a conocer el mercado, a visitar a los clientes y definir qué haremos.

Porque será caro, no sólo valdrá Miami donde ya tenemos bastante definido como lo haremos. También necesitaremos estar en el área de Nueva York y en California porque si no estás allí no abarcas EEUU…..y este país es muy, muy grande.

Vengo de estar la semana pasada en Miami. Definiendo con nuestros socios actuales y conociendo potenciales partners para el desarrollo futuro. Es verdad que es un mercado muy competitivo donde, a diferencia de otros países latinoamericanos, existen muchos competidores especializados en logística fashion. Es un mercado maduro pero con un potencial muy alto y al que las marcas europeas están llegando en masa y creciendo mucho (no sólo los Inditex y H&M, también Primark, Mango, Desigual…y otros seguirán llegando pues aunque muy competitivo es un mercado enorme donde gusta la moda europea, un buen ejemplo es nuestro amigo Papo Kling que está vendiendo todo lo que produce y más…

miamiComo no, aunque nos quedemos en la zona más industrial de Doral (donde tenemos varios clientes, empezando por nuestros  amigos de Perry Ellis y el gran Joseph que siempre tiene a bien invitarme a conocer los mejores restaurantes de Miami beach) es menester dejarse caer por la península que constituye Miami Beach y admirar los edificios Art Deco ahora todos hoteles.

Así, el primer día (con un jet lag tremendo especialmente de Jose María) cenamos en el recién inaugurado Matador dentro del hotel Edition, marca boutique de la cadena Marriot. Todo muy trendy, (as usual), y la comida aceptable…especialmente el guacamole con guisantes, curioso pero rico. Acabamos tomando un cocktail en un hostel hípster «The Freehand» que está muy de moda, en su terraza llamada The Broken Shaker y en el que nos dijeron que los cocktails eran “excepcionalmente” baratos…mmmm…a 12$ el cocktail tampoco es que fueran tan baratos pero … ¡Miami ya se sabe!

Otro día, invitados esta vez, cenamos en el Casa Tua del que me habían hablado y que empezó siendo un club privado hasta que se reconvirtió en restaurante italiano de moda. Ambiente megapijo, mucha gente guapa y precios en consonancia. La comida no es memorable pero se deja comer…

Y para poco más dio el tema porque fueron 3 días de reuniones intensas  donde, sinceramente, creo que avanzamos mucho en la definición de la estrategia que nos tiene que llevar a los objetivos de Visión 2020 (no lo mencionéis delante de alguien de Logis que os tirará el móvil a la cabeza ;))

Ahh…se me olvidaba, la mejor comida sin duda, en un japo de estos fusión peruana en un polígono industrial regentado por unos venezolanos…de lo mejor que he estado en mi vida.

Había rumores de que iban a abrir en Barcelona…a ver si es verdad …Kamiko sushi bar en el Doral.

 

Las Vegas: otro magnífico día en el casino…digo en la bolsa.

Mal de muchos consuelo de tontos, pero menos mal que todos mis amigos están igual. Nunca es que me haya considerado el más listo aunque yo creo que todos creemos tener un don especial para el mundo de la bolsa….y aquellos que nos movemos para arriba y para abajo y estamos en contacto con todo tipo de tendencias….pues más todavía….Me rindo, reconozco mi incapacidad, reconozco lo que siempre he pensado pero me he ocultado, que esto no es sino un gran casino donde siempre ganan los mismos; que utilizan todo tipo de cebos para que, honestos padres de familia trabajadores, nos dejemos llevar por la ambición y el dinero fácil y nos vayan, poco a poco, inoculando el veneno de la codicia. Finalmente, cuando ven que hay suficiente dinero en la mesa del black jack, encienden las luces, apagan la música y, sorpresa, gana la banca, nos hemos quedado sin silla en este perverso juego de las sillas musicales y hasta aquí hemos llegado…unos lo llaman el timo de la estampita, el tocomocho….da igual….reconozcamoslo, a todos nos pasa lo mismo y si nos dejan ganar de vez en cuando un poquito es para que metamos más y lo perdamos todo….esta es mi historia y la de todos mis amigos…pero, joder, si tu y tu y tu y todos perdemos…alguien tiene que ganar!!!!.
Todo esto me lleva a recordar mi viaje a Las Vegas de hace unos años; justo después de correr mi primera maratón…como no podía ser de otra manera en el viajero, tan cosmopolita él, la de Nueva York. Maratón ésta absolutamente espectacular, no sólo por correrla por los 5 barrios neoyorquinos, sino por el ambiente que se vive en las calles que la convierte en una experiencia difícil de repetir en Europa. Lo dicho, que llegué a Las Vegas y me alojé en el Bellagio (si, el de Oceans eleven y el famosos espectáculo de las fuentes). Que queréis que os diga…a mi me decepcionó un poco el hotel; colas tremendas en recepción, me asignaron una habitación que no estaba limpia, trajín para cambiarla…en fin, no has de ir a Las Vegas buscando experiencia hotel boutique. Vas buscando casinos, restaurantes, hoteles enormes, espectáculos, chicas voluptuosas…vaya lo de las películas. A mí para unavez bien pero no sé si repetiría con gran ilusión.
Muy recomendable la excursión al Cañón del Colorado (a ser posible en helicóptero ya que aterrizas en medio del Cañón). Además, para jugarme los cuartos y perder seguro, ya tengo la bolsa…

 

Por la autopista del Blues: Tennessee y Mississippi.

Desde Chicago, una vez recuperados de la maratón, tomamos un tren nocturno hasta Memphis, Tennessee. En la ciudad se respira el blues y rock, allí, en los estudios Sun de Sam Phillips, fue donde, por primera vez, el blues se convirtió en rock and roll de la mano de jóvenes alocados como Elvis, Carl Perkins, Jerry Lee Lewis….Merece la pena pasearse por Beale Street para entrar en los locales de blues en directo mientras te comes unas pringosas chuletas con la salsa local picante. Por supuesto, España es archiconocida y se creen que todos somos gigantes (entiendo que por la influencia de los Gasol).

Unos 100 km dirección Sur, siguiendo la I-61 o autopista del Blues, se llega a delta del río Mississippi, donde el blues es religión. De hecho, el cruce entre la 61 y la 49, muy cerca de Clarksdale, es donde se dice que, a comienzos del siglo 20, Robert Johnson vendió su alma al diablo y se convirtió en la primera gran estrella (poco después fue envenenado por el marido celoso de una admiradora). Clarksdale es  100% blues. Su festival, en abril, reúne a lo mejorcito y es todo un espectáculo. Nos quedamos en un hotel en las afueras, en una antigua explotación algodonera, que está formado por las antiguas cabañas de hojalata donde vivían los trabajadores negros de la plantación una vez abolida la esclavitud. El sitio es muy auténtico y divertido www.shackupinn.com (necesario reservar).

Para cenar fuimos al Madidi que es el mejor de la ciudad. El propietario es el actor Morgan Freeman, que nació en un pueblo cercano. Queríamos evitar la comida rápida y este es una especie de bistró neoyorquino…pues bien, cenando con nosotros estaba Morgan con el que departimos amigablemente y nos tomamos fotos. Luego nos invitó al club de blues que montó junto con un socio local que se presentó a gobernador de Mississippi dos veces (y lógicamente, y después de verle desenvolverse en la noche perdió ambas). Ground Zero es un sitio mágico si te gusta el blues y allí conocimos al gran Josh “razorblade” Stewart: estrella local a sus 70 tacos, que dio todo un recital.

El muro..en Chicago.

Esta vez nos ponemos deportivos, y os cuento que hace unos días fui testigo de la lucha de un buen amigo por terminar la maratón de Chicago.

En el ciclismo se llama “coger una pájara” a lo que en el maratón se llama “chocar con el muro”: momento en que, generalmente sobre el kilometro 30-35 de los 42 que tiene la carrera, el cuerpo del corredor dice basta y es un esfuerzo casi inhumano dar una simple zancada.

El año pasado corrió su primera maratón en Nueva York y fue mucho mejor de lo esperado. Acabó en 3:10 lo cual, a sus 40 años, y siendo la primera, cubrió las expectativas más optimistas. Estar ahí viéndoles correr y recorrer las calles de NY, con cientos de miles de personas apoyando a los participantes es una experiencia memorable.

Este año teníamos que visitar a unos socios americanos  que también  se dedican a la logística textil, así que mi amigo se decidió a correr la maratón de Chicago y así ambos pudimos conocer esta interesante ciudad.

Chicago es una ciudad muy plana, a orillas del lago Michigan y con una arquitectura art-deco que  impresiona tanto como NY, por eso íbamos muy optimistas, pensando en que se podría hacer un buen papel. A las 6:30 de la mañana estábamos en el Millenium park, preparando la salida, que sería a las 7:30. Una vez allí, hablando con mi amigo, las sensaciones (y eso es importante) no eran demasiado buenas, ..al tener buena marca, salió bastante adelante (teniendo en cuenta los 45.000 corredores que tomaban la salida). Me pareció que salía muy fuerte y esa fue su perdición.

La carrera comienza recorriendo la Magnificent Mile alrededor de la Av. Michigan donde se encuentran loa mejores hoteles y tiendas de la ciudad, posteriormente sube paralela al lago hasta Andersonville (barrio sueco) y Wrigley Field (estadio de baseball de los Cubs, de 1920), posteriormente retorna a la zona del loop (zona de negocios famosa por el tren elevado “L”) y se mete hacia el oeste hacia “Greektown” y “Little Italy”, donde está el famoso «Als» restaurant con sus sandwiches de carne pringosa que tanto gustan a Hillary Clinton. Justo allí, sobre la media maratón, su cuerpo dijo basta.  Se dio de bruces con el muro en el km 21 o la milla 13….esto es terrible porque todavía queda una barbaridad.  Veía como los tiempos empeoraban y empeoraban y además,  hacía mucho calor…cerca de 30 grados.

Visto desde fuera (y luego él me lo confirmó), acabar fue un martirio, pero lo logró. El tiempo no fue bueno (3:32) pero consiguió la medallita de finisher.

Un vez descansamos unas horas, pasar mi amigo por taller de chapa y pintura, nos fuimos a probar pizza tipo Chicago en el “Giordano’s”  y luego chuletitas en Twin Anchor.

Después partimos hacia el sur a conocer la autopista del blues…pero eso formará parte de otro post.